La responsabilidad de la alcaldesa de Betanzos en la grave situación del SAF.
La sra. Barral, delegada de servicios sociales y regidora asumía en la sesión plenaria de agosto su responsabilidad política por la situación del Servicio de Ayuda en el Hogar (SAF) y reconocía tener conocimiento desde diciembre del 2015, a pesar de su insistencia durante mucho tiempo de que lo tenía tan sólo desde el 2017. Casualmente una asunción y reconocimiento ahora pasadas la elecciones municipales. Sin embargo, resulta un tanto curioso que tanto desde el Partido Popular como también desde otras formaciones en su día, llevemos denunciando la grave situación que se da en el SAF hace ya más de dos años y venga ahora, tras una nueva comparecencia a instancias del PP, e intente una vez más hacernos creer que todas las irregularidades y deficiencias que se han dado sean tan solo desde hace 10 meses a pesar de su confirmación de conocimiento desde finales del 2015 y de que en el mes de agosto 23 domicilios hubiesen quedado sin atender durante varios días.
Nos parece increíble que vuelva ahora a hablar del anuncio de una nueva licitación cuando sabe la sra. Barral que los tiempos y las formas ya no le dan cancha de maniobra suficiente para hacer las cosas bien, y por ello probablemente tenga que prorrogar el contrato a la actual empresa concesionaria, algo verdaderamente lamentable tras todos los hechos ocurridos durante los últimos años, y más si cabe, pudiendo haber resuelto esta situación a inicios de este año con unos nuevos pliegos y plazos.
Igual de sorprendente, ha sido ver a la sra. alcaldesa y a su equipo de gobierno votar en contra de una propuesta en pleno para llevar a cabo la resolución contractual con la concesionaria por las numerosas irregularidades e infracciones cometidas, procedimiento este que en alguna ocasión ya el propio ejecutivo había planteado, y es que parece como si ”… o lo propone la sra. Barral o si lo hacen el resto no vale…”, ver para creer desde luego la total “desfachatez” e “hipocresía” de un gobierno municipal y su regidora, y más si cabe con un servicio tan delicado como lo es el de Ayuda en el Hogar y en el cual quienes están sufriendo toda esta nefasta gestión y desidias son tristemente sus usuarios, nuestros mayores.
No cabe duda alguna, de que la gestión de todos los incumplimientos e infracciones cometidos sobre el pliego de condiciones de dicho servicio ha de tener su responsabilidad política, ya que, ha quedado meridianamente claro que las diligencias tomadas durante este largo camino lleno de irregularidades son notoriamente responsabilidad de la delegada de servicios sociales, es decir, de la actual alcaldesa, la sra. Barral.