Los pasos de cebra sin pintar, fachadas pintarrajeadas y las zonas verdes a extinguir
- Cecilia Vázquez participó este sábado en la iniciativa A Cruz Verde é Moito Máis
Las aceras con excrementos de mascotas, las zonas verdes sin cuidar, barreras arquitectónicas por todos lados, grafitis en las paredes de los edificios, cascotes y cristales desprendiéndose de una casa abandonada, los pasos de cebra prácticamente borrados. Estas son algunas de los problemas de los vecinos de la zona urbana que comprende Bellavista y las calles doctor Fleming, plaza de Francisco Iglesias González, Cruz Verde y plaza de Dona Águeda. Calles en las que concentra una gran densidad de población y que son prácticamente el centro de la zona nueva de Betanzos.
Quejas que este sábado recogió la candidata a la alcaldía por el Partido Popular, Cecilia Vázquez, que participó en la mesa informativa A Cruz Verde é Moito Máis. El cambio de impresiones con los vecinos y vecinas comenzó a las 10:00 horas en un bar de Bellavista, con un café en el que participaron concejales, afiliados y simpatizantes del PP. Momento en que varias personas aprovecharon para acercarse a la candidata popular y transmitir sus inquietudes sobre el estado del barrio.
La comitiva popular instaló después la mesa en la plaza de Francisco Iglesias González, el estado del parque infantil con la valla rota y balaustres en el suelo con grandes tornillos asomando, son la muestra del desinterés del gobierno local por estos espacios de ocio. El abandono de la zona ajardinada, donde aún se puede ver el plástico hecho jirones que se usó al crear el jardín.
Excrementos de animales en el mismo acceso al parque, el edificio contiguo con todas las paredes de su soportal pintarrajeadas. Un vehículo que lleva meses abandonado sin que el concello haya hecho nada práctico para retirarlo. Una situación que desde el grupo municipal popular se trasladó en varias ocasiones al pleno, a través de los medios de comunicación y redes sociales.
Inseguridad vial total
El recorrido siguió desde Francisco Iglesias hasta el fin de la calle de la Cruz Verde ya en plena plaza del Campo. Los pasos de cebra sin pintar, una casa desmoronándose sobre una calle sin aceras, en las que los peatones tienen que esquivar el tráfico. Más pintadas en la plaza de Dona Águeda, que además cuando llueve filtra un torrente de agua a los garajes.
En definitiva, «un paisaje desolador en gran parte debido al desinterés y la falta dedicación del gobierno local a este barrio y a sus vecinos y vecinas». «Un estado de abandono general que se repite tanto en el casco urbano como en la zona rural» sentenció Cecilia Vázquez.